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Bueno, como
muchos de los viajes del diamanteescarbon, este surgió de un modo
raro e ilógico. Las ansias de sellar uno de los micro-países que nos
faltaban del viejo continente, combinado con una especie de
apuesta-obcecación que teníamos desde hace tiempo (InterRail 3) de
hacer un botellón en la Fontana di Trevi, nos condujeron a la compra
del típico Ryanair.
El viaje empezó
como todos, marabunta de gente en la terminal 1 de barajas y listo,
a disfrutar. Si por algo se podia caracterizar así a primeras, es
porque íbamos un gran numero, 14, de los cuales, una de las personas
Olga la Venezolana, no la conocíamos y otros de ellos, no estaban
muy familiarizados con los viajes relámpago del diamante.
Tras unas horas
metidos en la caja de cerillas azul-amarilla de Ryanair, tocamos
suelo Romano para coger el coche de alquiler y ponernos rumbo a San
Marino. Decir, que desde el primer momento y como ya es típico en el
diamante, los gustos de la gente hicieron que nos separáramos en dos
grupos, uno con ganas de Sellar San Marino y otro con ganas de
quedarse a ver Roma.
Yo, como miembro
de grupo San Marinense, contare lo que nos deparo ese día separado
del resto de Romanos.
Por meter algo
de introducción, contare que el grupo San Marinense, contaba con un
handicap muy importante, el gafismo. Aun no sabemos (Pinocho)
quien era exactamente el que propiciaba ese tipo de desproposititos
y malos presagios, pero yo os contare la historia para ver si entre
todos lo sacamos.
Nada mas llegar
al alquiler de vehículos, Hertz,
nos comenta la dependienta que el coche que tenia reservado Kalipo,
no puede ser pagado con su tarjeta de débito, por lo que, si no
poníamos una de crédito, no podríamos reservarlo. primer estigma de
Gafito. Tarjeta de Bernon en mano, conseguimos alquilar el coche, y
con ello nos pusimos rumbo a San Marino, (
Tiempo: 4h 30min y una distancia de unos 400 Km). Como habíamos
aterrizado sobre las 18:30 - 19:00 nos presentamos en San
Marino a las 12:30 de la noche. Tras el camino, varios lances
hicieron que perdiéramos algo de tiempo como por ejemplo el mal
tiempo, llovía a pincho, las carreteras Italianas tercer mundistas y
paradas de los
Carabinieri entre otras. Joder, aun recuerdo cuando los
Carabinieris nos pararon por llevar las largas y nos quedamos
parados como si fuéramos fugitivos, a Kalipo se le olvido abrir la
ventanilla, por suerte, nos indicaron un atajo a San Marino, algo
así como la etapa de los 1000 lagos en los rallys porque era plena
montaña llena de curvas. De que fuéramos cegando a todo el mundo con
las largas,
salió el mote de la chicharra amarilla para nuestro fiat panda
amarillo.
Por fin,
llegamos a nuestro destino y con la hambruna digna de no haber
cenado, nos metimos en una especie de
tabernilla cutre a comer unas pizzas!!. Salimos a buscar el
albergue, en este caso era el Affita, y como estábamos con la coña
de Gafito, todo apuntaba a que no seria fácil encontrarlo, ya sabes
gafito similar a Affita. Tras unos minutos callejeando por San
Marino, vimos un cartel en el que ponía Affita Hostel, ya esta,
había salido bien. Tras unas llamadas al telefonillo y sin obtener
respuesta, nos decidimos a entrar y subir por sus escaleras. Tocamos
una puerta donde ponía lo de Affita y para nuestra sorpresa, nos
salió una medio-monja mayor, la cual estaba placidamente dormida y a
la cual, quebrantamos indiscriminadamente la paz y el sueño. La
enseñamos el papel de la reserva y nos dijo que ahí no era, que
estábamos equivocados. Aquí se empezó a reforzar el espíritu del
Gafito!!! segundo estigma.
A la salida del
falso Affita Hostel, encontramos un Hotel, en el cual decidimos
preguntar para ver si nos podía decir donde se encontraba nuestro
Affita Hostel verdadero. El sitio era muy peculiar, un hotel
bastante bien decorado, moderno, con un toque de putiferio de lujo y
con una cacatúa blanca llamada Bianca la cual dormía placidamente. Tras un rato
preguntando a su chico de recepción (actor porno fijo) y tras
reírnos del gafe que nos acechaba, despertamos a la cacatúa, joder
como chillaba la puta!!! El recepcionista que ya nos estaba echando
con la mirada, no nos supo decir donde se encontraba nuestro hotel,
así que, ale a buscarlo.
En nuestra
búsqueda, un coche de Carabinieris nos sirvió como guías, recuerdo
que a la voz de Bernon y Pilar que decían a Kalipo, pero daleee,
daleee, con el coche... era un despolle. L es
perseguimos a pincho por todo San Marino hasta que pensaron que que
harían unos flipados detrás de nuestro coche de carabinieri a 80
km/h durante un rato. Provocamos que se pararan y les preguntamos,
amablemente, nos indicaron el camino, ya que estaba en un sitio un
poco confuso y con poca iluminación e información visual. A nuestra
llegada, teníamos que
 aparcar el coche, había 5 sitios libres, pero
cuando paramos el motor y salimos del coche, nos dimos cuenta de que
estábamos en el único de los 5 que ponía prohibido aparcar, creo que
esto puede valer como el tercer estigma ejeje.
Acabábamos de llegar a nuestro
Hostel el Affita Camere.
Como ya se conoce la faceta de puño cerrado de los diamantinos,
teníamos reserva para solo 4 de los 5 que íbamos, el plan, el de
siempre, entran 4 y cuando el amo de llaves esta inconsciente, entra
el 5º elemento. Pues así fue, entramos las dos parejas y Bernon se
quedo afuera y cuando la mujer nos puso todo a punto, ya que estaba
un poco mosqueada por la hora que era (01:30) y no contaba ya con
nosotros, Bernon consiguió entrar. Primera toma de contacto con la
habitación y lo que mas nos llamo la atención, fue que el baño
estaba a menos de un metro de la cama, pero no el baño en plan de
puerta y demás nooo mas en plan de taza del wc. Nos pusimos unas
copas y los 3 cavernícolas, Bernon, Kalipo y Chema, nos fuimos a
Rimini, según "Sandra Bulo" el Benidorm de Italia, claro que... no
estamos en verano pero bueno, había que ir a oler.
Cuando llegamos
a Rimini, parecía que no iba a ver ni un alma, pero poco tardo en
cambiar nuestra perspectiva de la ciudad. Al circular por las
calles, encontramos muchos garitos hasta las trancas y barrancas.
Era nuestra noche!!!! aparcamos el coche, nos tomamos la ultima
haciendo botellón, ya que nos habíamos llevado una botella de Whisky
y otra de Ron y listos, para el garito. Tenemos que reconocer que nos
equivocamos de garito en un principio, pero rápido salimos del bar
de rockeros donde nos habíamos metido y nos fuimos a otro mas de
nuestro estilo. El lugar elegido fue el
Gotha, un garito que
estaba bastante bien.
 
En Italia, no se
puede fumar en los bares de copas, por lo que los porteros, te dejan
salir a fumar a la calle con la copa en la mano. Claro esta que
esto tiene su ventaja, rellenarte la copa en el coche, pitillo en
la calle y listo, todo el rato bebiendo gratis en una discoteca
cara. Eso lo habrán pensado estos Italianos? supongo que no serán
tan cutres de hacer eso como nosotros.
Tras unas horas
en el Gotha y después de
que nos cierren ya las puertas, no podíamos dejarlo ahí, serian
sobre las 5:30 AM, cuando decidimos irnos a la playa. Es una playa
un poco peculiar ya que tiene en toda su costa, millones de
casetas, bares, atracciones y demás entretenimientos que están
ansiosas de ser desempolvadas en verano. Conseguimos atravesar una
de estas trincheras y llegamos a la playa. Una vez allí, surgió el
típico comentario, que un bañito? pues ahí que fuimos, Kalipo, que
estaba jodido de la garganta, no pudo hacer los honores, por lo que
se dedico a fotografiarnos y dejar para la posteridad esa
descabellada idea,
porque amigos, a finales de noviembre, ya os digo yo que el mar
Adriático esta
muy muy frío!!! Pues eso, Bernon y Chema baño en pelotas y corriendo
para el coche con la calefacción a tope, eso si, ahora podríamos
llevar de nuevo el coche a San Marino, ya que el aguita nos dejo muy
pero que muy serenos y duros!!!!! Esta historia me recuerda al InterRail 2,
cuando una noche en
Gdansk, nos fuimos
de fiesta a
Sopot, mas
concretamente al Viva Club y
nos bañamos en el mar
Báltico al salir del garito. Fue bastante bastante parecido.
 
De camino a
casa, nos dimos cuenta de que no teníamos nada, pero nada nada de
gasolina, por lo que si no buscábamos una gasolinera de urgencia,
nos quedaríamos tirados en las cutre-carreteras de Italia. Una vez
en la gasolinera, típico lío para pagar con billetes en el surtidor
automático y demás y las típicas fotos de perturbados, el gasolinero
flipaba!!! y aquí vino uno de los puntos de inflexión del viaje,
cuando Kalipo, en un ademán de hacer una foto rápida, desenfundo la
cámara, esta acabó en el suelo, con la consiguiente secuela de
pantalla-rota. Cuarto estigma y gran candidato al premio Gafito del
viaje. Creo que hoy en día ya la tiene arreglada, pero joder,
disgustillo para el chaval. Después de hacer otro poco el ganso, volvimos al Affita Camera para ver si teníamos
ya de una vez por todas la fiesta en paz.
Nada mas entrar
en la habitación, las chicas fliparon con nuestro nivel de
trompismo, no parábamos de pegarnos ya que teníamos una cama de
matrimonio para los 3 chicos. Claro esta que las peleas que se
produjeron ahí fueron tan intensas como inevitables!!! Kalipo, que
estaba durmiendo en el medio, acabo por marcharse a la cama con
Alicia, ya que Bernon y Chema, no paraban sus ataques colonizadores.
Ahora si, por fin tocaba dormir.
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